LASPALMAS 0-1 REAL
SOCIEDAD
Decenas de ocasiones tuvo Las Palmas para haber goleado a
la Real en el partido liguero disputado en Gran Canaria, pero entre los fallos
de Jesé y las impresionantes paradas de Rulli se esfumaron los goles.
Cuando más parecía que el tanto aparecería en Canarias
para alegría local, Javi Varas despejó horrorosamente para regalarle un balón
perfecto a Xabi Prieto, que sólo tuvo que empujar el esférico para perforar la
portería.
El delantero canario falló lo infallable durante el
duelo. Solo ante Rulli o rodeado de defensas, Jesé desesperó a sus compañeros y
a la afición presente con disparos que se empotraban contra el guardameta
visitante o se marchaban muy desviados.
Pese a que sus pases y desmarques fueron acertados, Jesé
nunca supo poner el broche de oro a sus jugadas y dejó escapar el tanto de la
victoria amarilla.
El guardameta argentino fue un muro bajo los tres palos
de su portería. Rulli sacó uno a uno todos los potentes disparos canarios y
dejó su portería a cero los 90 minutos.
Heroicas intervenciones de un Rulli que ha sido, sin
duda, el responsable de que los tres puntos se decantaran del lado Real en el
partido.
Con esta nueva victoria, la Real Sociedad asciende hasta
los 44 puntos en su casillero personal y se mantiene quinta en la Liga. Las
Palmas, con 28, se estanca en la duodécima posición, a esperas de lo que puedan
hacer sus rivales directos durante la jornada.
ALAVÉS 2-1
VALENCIA
Parece que lo del Valencia en Mestalla del miércoles
pasado fue un espejismo. El hambre con el que salieron a morder los
jugadores 'che' frente a los de Zidane no se vio en ningún momento en el choque
ante el Alavés.
Los primeros momentos del encuentro fueron un intento
constatnte de ambos equipos por hacerse con el control del partido. En los
primeros 45 minutos, una ocasión de Soler y un par de ellas de Manu García
fueron lo más interesante.
Tras la reanudación del choque, los de Pellegrino
salieron con ganas para intentar adelanterse en el marcador y casi lo consiguen
con tres intentos de, nuevamente Manu García, y de Rubén Sobrino, que
había entrado en la segunda mitad.
Pero para sorpresa de los aficionados de Mendizorroza, el
que acabaría poniendo el primer gol en el marcador sería el Valencia. Carlos
Soler fue el autor del tanto, al recoger un rechace tras una buena parada
de Pacheco tras falta de Parejo.
Con el 0-1 en el marcador, los de Pellegrino no se
vinieron abajo, al contrario, intentaron con más ganas todavía conseguir el
empate. Y ocho minutos después del gol de Soler, Ibai ponía el 1-1 con un
tremendo disparo imparable para Diego Alves.
El Alavés seguía en su ntento por hacerse con el partido
con un Valencia perdido en el campo. En el minuto 86, el recién entrado en el
campo, Katai conseguiría hacer realidad la remontada alavesista.
Los minutos fianles del partido fueron un quiero y no
puedo del equipo de Voro, que veía como sus opciones de rascar un punto de
Mendizorroza se alejaban aún más con la expulsión de Orellana en el minuto 88.
Así acabo el partido, con una importante victoria
del Alavés, que romìa una racha de 62 años sin ganar al Valencia y con el
conjunto de Voro recordando al equipo de antes del choque ante el Real Madrid.
BETIS 1-2 SEVILLA
El Betis volvió a caer en un derbi sevillano. Es algo a
lo que su afición se va resignando con el paso de los años, pero que no por
ello deja de doler para los verdiblancos.
Ante el Sevilla de Sampaoli, los de Víctor se adelantaron
y soñaron con acabar con un maleficio en el Villamarín que data de hace
más de 10 años. Pero ni por esas. El cansancio, los nervios o el miedo a ganar
atenazaron a un Betis que fue mejor durante la primera hora de juego y pusieron
en bandeja la victoria a un Sevilla que ganó con lo justo.
No hubo vendaval de juego ofensivo del Sevilla. Al
contrario, los hispalenses, quizás cansados por el choque de Champions ante el
Leicester, estuvieron a merced de un Betis muy activo en el primer acto. Lo que
les faltó a los visitantes -intensidad, presión, concentración...- les sobró a
los locales en la primera mitad.
Así sólo podía llegar el 1-0 y, tras un remate al
larguero de Mandi, Durmisi lo convirtió en realidad con un disparo de falta en
el que se abrió la barrera y en el que Sergio Rico no pudo hacer nada.
El Betis se tira
atrás.
Más de 3 años después, el Betis le volvía a marcar en
Liga al Sevilla en el Villamarín, pero los verdiblancos no fueron capaces de
aguantar el resultado en el segundo acto. El Betis salió a dejar pasar el
tiempo y el Sevilla, sin hacer su mejor partido, se fue volcando sobre la
portería de Adán.
Tras un par de avisos, una acción a balón parado rematada
por Iborra le permitió a Mercado llevar el empate al marcador. El tanto hizo
añicos los planes de un Betis que se quedó sin reacción y que claudicó con
un tanto de Iborra a balón parado, este tras prolongación de N'Zonzi, que
estaba en fuera de juego.
No hubo tiempo para más, porque el Sevilla, mucho más
equipo, controló el 1-2 como no supo hacer el Betis con el 1-0. Ni ocasiones
tuvieron los béticos de volver a dar la vuelta a un marcador que tuvieron a
favor durante más de una hora, pero que no supieron gestionar por su exceso de
conservadurismo.
En Sevilla ilusionó Durmisi, soñó el beticismo y se
impuso el Sevilla con un estelar Iborra.
LEGANÉS 4-0
DEPORTIVO
Leganés y Deportivo, con claras trayectorias
descendentes, disputaron un choque con aroma a final en el que triunfaron los
locales y naufragaron los visitantes, un Deportivo roto y sin alma que necesita
un cambio de rumbo urgente.
Los coruñeses, que acabaron con uno menos después de la
expulsión alevosa de Albentosa por codazo, fueron uno de los equipos más
débiles que pasaron por Butarque esta temporada.
Pudieron adelantarse de manera tempranera con un remate
de Kakuta, pero fue de lo poco que hicieron en el plano ofensivo en todo el
partido. El Leganés, que acabó llevando la 'ola' a la grada, sentenció a
Garitano y se reenganchó a la lucha por la salvación de la mejor manera.
En la primera mitad, Szymanowski, con un remate
espectacular, hizo el primero y Mantovani, en un saque de esquina, lo puso
imposible para los visitantes.
Tras el paso por las duchas, Gaizka Garitano se la jugó
con su último intento de revolución en Coruña, pero los cambios incluso
debilitaron más a un Deportivo tocado.
Así, lo más normal era que el Leganés cerrara la goleada,
algo que hizo tras la roja a Albentosa. Primero Unai López, en plena racha tras
su tanto en el Camp Nou, y luego Bueno, que prácticamente acababa de entrar,
cerraron la goleada y pusieron fin a la horrenda racha de 11 partidos sin ganar
de los 'pepineros'.
Crisis saldada para Asier Garitano y traspasada a un
Deportivo que queda a un paso de los puestos de descenso.
EIBAR 3-0 MÁLAGA
El Eibar suma tres puntos que son de oro porque sirven
para saltar al tren que conduce por Europa. El conjunto 'armero' empaquetó el
triunfo del 42 al 53. Tres zarpazos que dejaron herido a un Málaga ya extraño
desde la alineación.
'Gato' Romero sacó un centro del campo experimental entre
bajas y rotaciones. Aun así, pese al inexistente triángulo que intentaron
formar Llorente-Duda-Fornals, la igualdad duró hasta la jugada que
desniveló el marcador. Una acción polémica.
Porque Enrich estaba en posición incorrecta justo en el
momento en el que recibía el balón previo a la asistencia de
gol. Quizá por centímetros, pero el asistente de Estrada Fernández no
decretó nada, pase y gol de Adrián. En el debe de Luis Hernández está haberse
vencido en la carrera, pues pudo haber llegado al pase de Enrich.
Hasta el gol, poco fútbol y todavía menos ocasiones. Con
el 1-0, el Eibar se convirtió en el único equipo que se dejó ver en Ipurúa. El
Málaga entró en 'shock' y no salió del trance.
Superioridad
armera en la segunda mitad
Tras el descanso, el Eibar salió del vestuario y el
Málaga, no. Juankar cometió penalti evitable sobre Pedro León y lo
transformó Adrián. Pocos minutos después, Enrich remataba de forma acrobática
un buen centro lateral.
Con el 3-0 en la mochila, se dejó de jugar al fútbol
entre cambios, interrupciones y tarjetas. El Eibar, con 38 puntos, se pone a
uno de la sexta posición que ocupa el Villarreal. El Málaga, con 26, seguirá
buscando su identidad.
ESPAÑOL 3-0
OSASUNA
El choque correspondiente a la jornada 24 de Liga entre
Espanyol y Osasuna ha terminado con la victoria de los locales por un
contundente 3-0. Una victoria muy importante para los 'pericos' y una derrota
muy dura para los visitantes.
Los pupilos de Quique salieron muy motivados desde el
primer minuto y eso se notó en el campo, con un Espanyol que poco a poco se iba
acercando a la portería de Sirigu, de lejos el mejor de los visitantes.
El gol 'perico' llegó en el minuto 17 con un gran remate
de cabeza de Felipe Caicedo aprovechando un buen centro desde la banda derecha
de Hernán Pérez. Osasuna tenía que intentar empatar el partido, pero sus ganas
duraron muy poco.
Diez minutos después del gol del delantero del Espanyol,
los de Vasiljevic sufrieron un nuevo golpe, Oier fue expulsado por un agarrón
en el área, el árbitro no dudó, expulsión y penalti. El encargado de lanzarlo
fue Caicedo, pero un gran Sirigu le acertó el pensamiento.
Con Osasuna con un 10, el equipo local se vino arriba,
siguió con el control del encuentro y trató de buscar el segundo gol que
les diera la tranquilidad necesaria para irse a los vestuarios en el descanso,
pero no fue así, el marcador ya no se movería en la primera mitad.
La segunda parte empezó igual que acabó la primera,
con el Espanyol asediando la portería de Sirigu y en el minuto 46 Jurado puso
el segundo tanto en el marcador. El centrocampista cogió un rechace al borde
del área y desde allí pegó un zapatazo, imposible para el meta, que con muchos
jugadores por medio no pudo hacer nada para evitarlo.
Tras el segundo tanto de los de Quique y con un jugador
menos, los 'rojillos' poco pudieron hacer para remontar el encuentro, que a
partir de ahí fue, más aún, un monólogo blanquiazul.
Gerard Moreno, uno de los mejores del partido, puso el
tercero en el marcador en los últimos compases del partido, tras un regalito
de Causic. El defensa de Osasuna le dejó un balón franco a Moreno que
definió con mucha clase ante Sirigu. 3-0 y Osasuna más hundido.
ATLÉTICO 1-2
BARCELONA
El Atlético-Barcelona nos dejó un nuevo choque
electrizante y con muchas alternativas que reenganchó al Barcelona a la lucha
por el título de Liga de la manera más agónica.
Como ya viene siendo la tónica habitual en los
enfrentamientos entre ambos, el encuentro fue muy igualado. El choque, partido
estrella de la jornada, invitaba a la locura, pero ambos equipos pecaron de
cautos en el inicio. El Barcelona, con un remodelado esquema en el que Mathieu,
Umtiti y Piqué se situaban como defensa de tres en los ataques y Sergi Roberto
echaba una mano en las defensas, parecía que no se jugaba mucho y salió a la
expectativa.
El Atlético pudo matarle, pues le dominó y le acorraló,
pero no tuvo la puntería que sí tuvo hace unos días el PSG en el Parque de los
Príncipes. Por eso, y por un buen Ter Stegen, se salvó el Barcelona de verse
abajo en el primer acto.
El paso de los minutos mejoró la versión de un Barcelona
que, como un enfermo en estado crítico, mejoró con el paso del tiempo.
Desentonaba un Iniesta lejos de su mejor nivel, pero la 'msn' nunca falla. Así
llegaron las primeras ocasiones azulgranas, todavía en la frontera entre el
primer y segundo tiempo, y que llegó como un bálsamo para un Atlético cansado y
como una tortura para un Barcelona que olía sangre.
Goles agónicos.
El segundo acto se movió en los mismos derroteros, con el
Atlético apretando y el Barcelona mejorando una vez que el equipo rojiblanco
empezó a cansarse. En una acción rocambolesca, con mil rechaces, Rafinha puso
un 0-1 que era oro puro, pero que perdió importancia con el rápido empate de
Godín.
Parecía que el uruguayo amargaba de nuevo una Liga a los
azulgranas, pero Messi, quién si no, salió al rescate de los suyos para, en una
jugada muy trabada, poner el 1-2. Quedaban prácticamente 5 minutos y el Atlético,
en la reserva, no tuvo fuerzas para más.
Sin buen juego o porte, el Barcelona salvó una de las
peores salidas que le quedan y presiona a un Real Madrid que tenía la Liga casi
en el bolsillo hace 7 días y que ahora tendrá que sudar para salvar un título
que parecía ganado de antemano.
ATHLÉTIC 3-1
GRANADA
Pese a que el Athletic comenzó desde muy pronto
encontrando portería, al final terminó sufriendo para llevarse la victoria.
Susaeta abrió el marcador en los primeros once minutos del encuentro, gracias a
la buena asistencia de Beñat, en un tremendo error de la zaga andaluza.
Pero se tornaron los papeles y la defensa rojiblanca se
durmió en su área, provocando el tanto en contra apenas tres minutos después.
Mal balón sacado del Athletic y ocasión que aprovecha Carcela para poner el
empate, de nuevo, en el luminoso de San Mamés.
El Athletic rompió la igualdad en el marcador con una
jugada ensayada que sentenció a la perfección Lekue. Error de Ochoa, cesión y
gol de los locales para ponerse por delante en el luminoso.
Ya en la segunda mitad, el Granada se enfundó el traje de
guerra y comenzó a bombardear la portería rival, gracias a unos minutos que
fueron totalmente andaluces. Pero el Athletic es mucho Athletic y nunca hay que
confiarse. Ochoa volvió a cometer un error, esta vez en un despeje, y le regaló
un balón perfecto a San José para que sólo tuviera que colocarla dentro de las
redes.
Tercer y definitivo gol del Athletic para sentenciar el
partido del lado local, pese a que el Granada se empotró con la madera minutos
antes, pero sin poder encontrar más veces la fortuna en el gol.
Los goles de los
errores
Curioso dato podemos sacar del resumen del partido. Los
cuatro goles nacieron de errores cometidos tanto por la defensa rival como por
el guardameta.
Ochoa fue el que se llevó las de perder, propiciando los
dos últimos tantos locales con fallos principiantes.
Finalmente, nueva victoria del Athletic para situarse
octavo en la clasificación, con 38 puntos, mientras que los andaluces continúan
penúltimos, con su agónica pesadilla en la zona del descenso.
SPORTING 1-1 CELTA
El inicio del Sporting fue digno de una goleada a favor
de los asturianos al descanso, pero sorprendentemente, el primer periodo
terminó sin goles, a pesar de Burgui.
El ex madridista fue el jugador más peligroso de un
equipo que comenzó a hacer trabajar a Rubén desde el minuto 2. Tres paradas
consecutivas, dos a Burgui y una a Carmona, comenzarona encumbrar al meta como
el mejor de los suyos.
Traoré se encontró el mismo resultado a un cabezazo a
escasos centímetros del portero que veía como sus compañeros eran incapaces de
llevar peligro hasta la meta de Cuéllar.
Con Aspas en el banquillo, Bongonda y Rossi fueron meros
espectadores del juego del Celta, un juego lento, previsible y sin continuidad
alguna.
El punto de
penalti hizo justicia... momentánea
Pese al arrollador primer tiempo, el descanso llegó con
el 0-0 en el marcador. Los locales, sin embargo, abrirían el marcador en la
reanudación mediante el tanto de penalti de Moi Gómez tras la pena máxima
cometida por Planas.
A partir de ahí, el Celta quiso reaccionar, aunque el
Sporting disfrutó de varias ocasiones protagonizadas por Moi, Burgui, Carmona y
Traoré, que tuvo un poste, aunque ninguna pudo evitar lo que se avecinaría más
tarde.
El partido
cambió en sólo un minuto
Jorge Meré vio la roja tras agarrar a un Bongonda que se
plantaba solo ante Cuéllar jugada que coincidió con la entrada de Iago Aspas al
terreno de juego.
En un sólo minuto, el Sporting pasó de dominante a sumisa
presa, especialmente cuando el delantero galledo convirtió en gol la falta de
manera muy inteligente, ya que engañó a la barrera al tirar por bajo.
A partir de ahí, el asedio del Celta fue tan claro como
estéril, ya que Cuéllar y la defensa local dejaron el partido en un empate que,
a modo global, no parece demasiado injusto.
Este resultado no aporta mucho a los objetivos de ambos
equipos. Europa sigue lejos para el Celta, mientras que el Sporting necesitaba
los tres puntos para huir de la quema.
VILLARREAL 2-3
R.MADRID
Pasó la prueba de fuego de la visita al Estadio de la
Cerámica el Real Madrid y lo hizo con la garra y la volatilidad que
caracterizan al equipo blanco. Los de Zidane estuvieron horrorosos durante más
de una hora, pero mejoraron con el cambio suicida de Isco por Casemiro y
acabaron remontando para salvar el liderato.
Lo hicieron, eso sí, tras un penalti más que dudoso por
mano involuntaria de Bruno, que permitió a Cristiano anotar el tanto del empate
y dejar la remontada a un paso con 20 minutos por delante.
El Villarreal es mejor, pero no lo aprovecha.
Fueron mejores los de Escribá en la primera mitad, pero
no fueron capaces de traducir su superioridad en una ventaja en el marcador más
que merecida por el despliegue de Trigueros y Bruno en la línea medular.
Mágico Castillejo, sólo el desviado punto de mira de Jonathan evitó lo que
parecía una quimera: que el Villarreal se pusiese por delante del Madrid en un
partido tan clave como este.
La reanudación, con un Madrid mucho más madurado y un
Villarreal cansado, parecía cambiar el guion y dos ocasiones marradas por los
blancos así lo ponían de manifiesto, pero fue el 'submarino amarillo' el
que dio primero en una acción en la que Trigueros batió a Keylor.
Con el equipo blanco ya desquiciado y el Villarreal
propenso a tirarse atrás, Bakambu aprovechó para poner el 2-0 en un contragolpe
en el que Ramos se quedó pillado y habilitó al atacante congoleño, que no
perdonó en el mano a mano.
Un Madrid de dos caras.
Y ahí llegó el mencionado cambio de Isco por Casemiro.
Con el malagueño las fuerzas se igualaron y pronto el equipo blanco acortó
distancias, tras un gran centro de Carvajal que llevó a la red Bale con un
estupendo cabezazo.
El Villarreal, cansadísimo, renunció entonces al ataque,
pero quedaban aún 20 largos minutos para el final del partido, que se le
hicieron eternos a los de Escribá. Y el penalti les acabó de matar.
Ya con 2-2, el Madrid acumulaba llegada tras llegada y
sería Morata, tras una recuperación en el centro del campo en la que el
Villarreal pidió falta, el que batiría a Andrés Fernández -sustituyó a Asenjo
por lesión- para dar el triunfo a los suyos y dejar el liderato en Madrid.
Hubo ocasiones para el 2-4 y para el 3-3, pero el
resultado ya no variaría y confirmaría la máxima de los últimos días: hay Liga,
pero este Madrid nunca se rinde.
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